Antes de comenzar la ruta, tuvieron lugar las recomendaciones de rigor sobre medidas de seguridad y manejabilidad de los kayak.
Para posteriormente tomar contacto directo con nuestras embarcaciones.
Durante tres horas hiciimos un recorrido por las diferentes calas que hay entre Los Escullos y Punta Pelada, espacio protegido al que solo se puede acceder en embarcaciones sin motor, por lo que pudimos disfrutar de fondos cristalinos y playas únicas.
También hubo tiempo para disfrutar del kanoing y baños en pleno mar.
Impresionante experiencia para todos los asistentes a la actividad.